martes, 13 de mayo de 2014

LA AMANTE DEL PUEBLO

<a href="http://maduixesixocolat.blogspot.com/traductor-con-banderas-animadas-para-tu.html/" target="_parent">Traductor
English French German Spain Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified
Quiero esto en mi Blog!






“No sé de qué están hechas las almas, pero la suya y la mía parecen ser la misma.”

— Cumbres Borrascosas - Emily Brontë

Sofía se  asoma  a  la  puerta  de  la  tienda  de   víveres, cuando   ve  llegar   a Teresita. 
-Hola  niña, esta  la  abuela?-
- Abuela es  Teresita-

Una  mujer  de  alrededor  de  unos  60  años, con  el   cabello  canoso y  corto,  con  facciones   cortadas por  el  tiempo, pero   con  un  toque  de   belleza aun muy conservado que  denota  la  hermosura de lejanas  épocas  y  que  el  tiempo opaco. Mil  atuendos superpuestos, una  pañoleta   verde  atada en  el cuello,  de  andar seguro  con  elegancia  y  garbo, detrás  de  ella  un ejercito  de perros pulguientos  y mal olientes  que no se le  despegan ni día ni de  noche.

Terminar  aislada  en una  casa  del  centro del pueblo,  en condiciones  infrahumanas, rodeada  de toda  clase  podredumbre, desechada  del mundo  entre  cartones  y periódicos  viejos, ocultándose  tras la  suciedad  y el mugre , el olor a sus  únicos  amigos “los perros”;   nunca  fue  lo que espero  esta   dama de  sociedad  como  lo era  Teresa Donato.

Sofía  le  entrega un  pan  y algo  de chocolate,  por orden de Nuria.
-Teresa  no deje  entrar  todos los  perros, mira  el  relujó  que  dejan-  Dice  Nuria
-Tranquila   Mija,  Nurita  esa  es su nieta?, que  guapa esta  niña, con esos ojos  verdes (de  quien los  saco mi niña?)
-Nuria  la  corta  tajantemente    le  entrega  algo  de  dinero  y   la  despide.

Cuando  se  aleja,  Sofía  la  mira  con  gran  curiosidad  , esta mujer  tiene una elegancia innata , una  reina  rodeada de  su ejercito de perros .

Curiosamente  le  pregunta  a  la  abuela, que  si  son  amigas,  ella  se  turba  un poco y no le  responde.  Años  después ,  Nuria  le contaría parte  de la  historia, en  sus pertenencia  se  encontró  una  vieja   fotografía.




Fruto de  la  revolución  que traía  esta  joven,  fomentada por las  carencias  a que se  expuso en la  guerra, la  orientaron completamente  al capitalismo  desmedido, desde el mismo momento que piso las ricas tierras americanas, se  tomo  la tarea de  despilfarrar  su creciente fortuna familiar.
Una  mala   combinación  de  belleza,  orgullo, garbo   y  el  mal  sano  dinero, hicieron  de  Teresa  “La patrona  de la  época”. 
Cabalgando  en los  caballos  de  raza  fina, engalanada  con  los mejores  atuendos traídos algunos de  Europa y otros confeccionados por sus tías. La pañoleta atada al cuello, los  sombreros  gigantes al igual  que las  gafas de sol y  sin falta  las  botas  equinas españolas. Marcando así con  su  estilo propio  la moda de aquel sencillo  lugar, dejando a más de uno boquiabierto y a las  señoras del pueblo corroídas de la  malsana envidia.
Mariana se asomaba al balcón,  observando el  corrillo que  hacían los  niños , y como se  apartaban y miraban las damas y  algunos caballeros  de la  época.  La imagen de  esta  mujer era majestuosa inolvidable y segura.
-¿Que  tenia esta mujer  que despertaba los más recónditos sentimientos y deseos ocultos? -, la  curiosidad y el misterio invadían  a  Mariana, al igual  que  su  anhelo inconsciente  de  ocupar  algún día.. El  lugar de  esta  amazona.
Los  largos  periodos  de  ausencia eran  justificados  por  las  tías  que  la niña  con el  hecho que se encontraba  en la  capital  estudiando  periodismo  en   una  universidad  de  renombre, y  al  inicio  los profesores e instructores  asistían  a su casa, la educación de ella  erra única y particular…”La formación de una damita de sociedad”.




Fue así cuando  al hacer presencia en este medio, nunca más  dejó de pasar desapercibida,  siendo más notoria  aún con los  grandes  festines y escándalos que  siempre la  rodearon.  En las  afueras del pueblo  construyó una   cabaña  en  una de sus haciendas, con el objetivo único de  guardar algo  su intimidad  de las  habladurías  de la gente.



En la  cabaña organizaba  eventos, bailes y milongas, que se convirtieron con el tiempo en el centro social , dotando de  vida a  este pueblo aún naciente.  Sólo  un grupo muy selecto  de  invitados eran los  asistentes a las mismas ,la clase social  alta y pudiente (ningún enruanados  o apargatados), los  gamonales e  hijos  de  recientes  ricos , no  así  los más  cultos.  Se  iniciaba  aunque  no era  muy conocido  el  consumo de  sustancias psicoactivas ( marihuana etc.), algo no era nuevo para  que  ya  las  había consumido en  Europa  donde   fumar y beber era parte de la educación y  un indicador de clase social. Encontrando   en    este  nuevo mundo subdesarrollado   la  fabrica  de oro , la  cuna de  la  producción   de  la mejor , “con la  más  alta  calidad  y  bajo  costo”. Intentaron  más de una  vez  llevarla  a rehabilitación, y  nunca   lo permitió, para  ella  este comportamiento  era completamente normal  y  corriente  en  países  “cultos” como del  que  ella  procedía  , no  acorde  a una  sociedad  mojigata  que  en ultimas no le  importaba.
Los   licores   caros  y  los mil  hombres  (oportunistas)  la  mayoría,  que no  desaprovechaban, para  hacer parte  del  grupo  selecto de pretendientes, en  busca  de un  buen  rato  y en el mejor  de los  casos  una  buena  noche.



En este  entonces  hizo su aparición Francisco, un  joven  apuesto de  buena  familia  Argentina, con un  cargo  diplomático que sostenía un matrimonio por  conveniencia, se conocieron asistiendo a las clases  de  Periodismo  a la  “Teresa  Donato” de  aquellas  épocas, soberbia, orgullosa y  altiva.
No  puedo  evitar  desearla desde el primer momento, su  desatino y coquetería  sin límites , el  desenfreno incontrolado  de la pasión los  involucro  en una  historia  de  amor y  desamor, que  despertó los  peores instintos  de las  dos  partes, llevando  a los  límites  extremos  de la  locura  a Teresa y  a la  muerte a  Francisco.



Desde  el primer  encuentro, no pudieron  contenerse,  afloraban los  sentimientos y las pasiones con tal intensidad que no eran  dueños  de  sus  cuerpos y con el tiempo ni de  sus almas, se  despertó  en  ellos  la  fiera dormida  que todos tenemos  dentro “él  animal” ( que  consume  y acaba), el  deseo apasionado   los  consumía,  los  devoraba, el  estimulo de una palabra  un  beso  una  caricia, los  condicionaba  a no dejarse  nunca.  No midieron  consecuencias, dejándose  llevar  cada  día en  este   vuelo sin  retorno sin tocar  suelo, el  estar en las  nubes, los consumió  el  encanto de  lo  prohibido y lo escondido.
Amaron  hasta  morir, con tal  fuerza y devoción que no  era posible  la  quimera  idea de  vivir  el uno  sin  el otro.
Al principio las  salidas e incursiones eran ocasionales, pero  como  buena  droga que es  “él amor”, siempre se  quiere más,  se  quiere  todo, no se conforman con partes ni momentos, se  desearon  hasta beber la última  gota del mismo… Un  sediento en  el  desierto.


El precio de  lo clandestino (“Definitivamente  el  amor  es una mierda, el  que se  enamora  pierde”), y este par  de “locos  enamorados” lo hicieron sin medir consecuencias, dejándose  llevar por los momentos  de pasión y  libertad  uno  al  lado  del otro, cuando se  dieron  cuenta  era  demasiado  tarde, estaban completamente involucrados  en una relación que le  constaría la  vida  a   él  y  la  cordura  a  ella.

Poco  después  de las  salidas  sin  desenfreno, una consecuencia lógica  de las mismas fue aparente “el embarazo”, el  nacimiento de esta  vida significaba la muerte del idilio, el amor  aterrizado, real y responsable.


Un  completo problema  para  Francisco  ya que colocaba  en  Jaque  su posición social, económica y  familiar.  Así   hizo lo que  todo  buen  hombre de su nivel social  haría, usar la voz de la  cabeza acallando la conciencia , sin mediar los  sentimientos y  haciendo alarde de “buen juicioso”; tambaleaba  su fama de caballero  en una  sociedad conservadora y machista, no  quedaría en entredicho su reputación, esto era claro.  Cegó sus sentimientos y escucho su cabeza, dejando tirada  a Teresita e ignorando su  problema y los sentimientos que los unían, abandonándola  a  su suerte.. Condenándola  a una muerte en  vida. 
Ella hecha un mar de sentimientos, se debatía  entre el  amor a su amado, la  presión social,  y un  sentimiento mucho más noble y fuerte que  cualquiera.. El amor de madre, al niño que  crecía en su  vientre. Aunque su alma se debatía entre el miedo y la confusión del momento, siempre tubo claro  quien ganaría… Si  de  elegir  se trataba,  la  decisión  ya  estaba tomada.
Teresa  lo deseo   desde el primer momento  en que lo  sintió la alegría con cada movimiento, anhelo  darle  el hogar y la  familia  que  ella no  tuvo, tanto así  que dejó a un lado sus  vicios de  juventud, el  cigarrillo  ò los cachitos que  probaba de  vez en cuando, empezó  a comer un poco mejor, se cuidaba… Con esta nueva vida, la vida de ella renació, tomando sentido y curso.
De las prácticas y conductas   aberrantes de Francisco   ni la misma Teresita se salvó.  Recibiendo una suma de maltratos, era una suma de maltratos e improperios que  iban  desde el sexual hasta el  más evidente el físico, pasando por  el psicológico y demás. Ella los acepto, con la resignación que  le daba su  tendencia de un comportamiento  masoquista y su formación orientado por  el  amor ,el  deseo y otros sentimientos  mal  enfocados.. Se  dejó llevar. 
Cuando  supo  del descuido  que había tenido, Francisco la agredió de tal  forma , que  se podría   distinguir de una tortura, arrojándola  al  piso, propinándole un sin número de  patadas  repetidas, en su intento por hacerla  abortar.  No logró con éxito  su acometido, la criatura estaba tan aferrado a ella y   a la  vida  que fracasó. 
Esta  acto, marco el inició de  la caída en picada de Teresita Donato…

La fama  de  teresita, alcanzó  límites  inimaginables, alimentada por los  comentarios mal intencionados de los que un día se hicieron llamar sus … “Amigos”; según los cuales por   la  cama  de  ella  paso medio pueblo, los  gamonales, los  políticos y dirigentes,  los  que no pasaban lo inventaban.  Ni en sus mejores  épocas esto fue  realmente  cierto,  era altamente selectiva y  fiel  a su amor de  juventud  Francisco, el hecho verídico fue que se rodeo de la peor especie de la humanidad y confió, el ser humano más bajo de la cadena “Los Buitres”, que  sacaron de ella  el mayor provecho, incluso después de  ver agotada las arcas de su fortuna, continuaron explotando y utilizando su cuerpo.  Hasta que  en su estado de  locura, se protegió con amigos  leales e incondicionales..  Los perros. ,. 












Como   aves  de  rapiña,  usurparon  lucrándose, aprovechando así  el  estado de  vulnerabilidad  de esta joven con  alma de niña,  quien  en medio de su rebeldía y sus carencias afectivas, busco en el amor , en el deseo, en el licor y  convirtió su  vida en cadena de excesos y de pasiones   desaforadas…. El resultado en el transcurso de diez años  acabo con  su herencia  la dejada  por  sus padres  y  la muerte  de  sus  tías.  Nunca volvió   al  inquilinato  de la calle de   Lourdes  donde  perdió sus mejores  años  de  juventud  y termino sus días  en la  soledad de un Geriátrico, (hogar de la  tercera edad) del  pueblo,  muerta en vida  y rodeada  de  sus recuerdos.

Fue  desde ese  momento  que    ella  entró  en el estado de completo abandono, le  perdió la razón y el  porque  a  la  vida. Corto el fino hilo que une la  fantasía con la realidad.  Se aisló  protegiéndose  así de los mezquinos seres humanos que tanto daño le habían hecho, rodeándose de un combo de nuevos amigos, los perros.  Optó  por  el aislamiento voluntario, por soltar los amarres que la mantenían en el mundo real;  dejando así el estudio que pronto culminaría, el instinto de supervivencia básica que  la obligaba a comer, hablar, a vivir y algo superior a ella la Fe… Fue  justo en ese momento en  el que abandono sus sueños y dejó de creer ,que la vida la consumió lenta e inexorablemente… A una muerte en vida, sola ,con su soledad y en silencio, con su tristeza. 




“Si no recuerdas la más ligera  locura en que el amor te ha hecho caer, no has amado.”
William Shakespeare.

No hay comentarios:

Publicar un comentario