Entrar allì fue evocar su vieja Cuba... Los recuerdos se vinieròn como tropel.
Un Bar de la zona aledaña , escondido en aquellas calles empedradas con el sabor a cuba en todo su esplendor, el Son cubano se escuchaba a unos escasos metros ya cercano al establecimiento.
CUBA LIBRE..
"Solo
el que vive un exilio
voluntario ,llega a sentir
la sensación quemante de la
distancia, no es posible imaginar el terrible vacío de
estar lejos, la sensación de añorar la compañía de las personas que amas, y aquella culpa
e incertidumbre que te corroen , cuando Dios no quiera
les suceda algo"
Ella se enamoro , como lo hacen las mujeres de
ojos grandes, como una idiota.
Ángeles Mastreta
Siempre que
Amelia lo nombraba sus ojos se ensombrecían, luego de 10
años de
su muerte el seguía
presente en su mente, aunque
fuera de su corazón.
No era
una mirada de tristeza, ni de alegría
si no de alivio, hablar de él
era retomarla a un episodio que no parecía muy
feliz, era volver a su natal
Cuba.
En las calles de Varadero , con un vestido
blanco suelto hecho por la
abuela calentadorcito con
los retazos del mercadillo, y a los recuerdos
más felices de su vida
que paradójicamente fueron los de
mas pobreza. El caminar sin
zapatos por la playa sintiendo la arena
, el olor a mar.
Era
recordar como corría de una lado
al otro detrás de los
turistas esperando que dejaran
valiosos tesoros, trozos de jabón
o quizás un cepillo dental 8 que
utilizaba para hacer los
mejores pendientes y pulseras.
Su abuelo un Comunista
de total convencimiento uno de los pocos que
vio en Fidel una salida para
pobreza del pueblo, y al que proclamaba
como su mejor religión , iba
sin todos los martes primeros del mes
por las provisiones.
- Esta
vez llego menos arroz abuelo-
y la
carne?
Toco
hacer arroz a la
cubana (arroz con huevo frito y pasta de tomate), esto Amalia lo
agradecía , como lo hacia a Dios por
su suerte.
Ni para que preguntar por
el papel higiénico , si todo
podía faltar menos la educación
como le decía el
abuelo:
Mira
niña que Le debemos
a Fidel que hasta
tengamos el culo
graduado ( Ya por el habían
pasado las paginas de los
más famosos eruditos
predominando los Yanquis
de mierda como decía
el abuelo.
Amelia
era una niña pequeña
muy delgada , con piel
blanca y ojos enormes negros, con la
bondad en su mirada.
- Su abuelo el
único contacto con el mundo
y la alegría, la
quita de 5
hermanos, ignorada en las
correrías de infancia y juegos
de estos niños.
Así aprendió Amelia
lo que era vivir con lo
básico y feliz, se convirtió en una
gran cocinera, la comida de mar no faltaba su hermano Martín era pescador los camarones
el arroz negro con tinta
de Pulpo. Nunca supo que
era un chuche y probó el primer refresco a los 25 años.
Donde
a los 14 años
su madrina le
consiguió el puesto de su
vida, niña.
Como
mucama en un hotel
de la isla, el puesto que toda
niña , joven y adolescente
de cuba anhelaba con la
esperanza de ser
rescatada por un extranjero
y salir de este mundo
de “limitaciones”, la
realidad era que no
se contaba con lujos, pero si con una
educación estricta y esmerada, con
un sistema de Salud
en el cual se podía acceder, y una alimentación que aunque no la mejor se
esforzaba por ser balanceada.
Al llegar a
la adolescencia el medico asignado se encargaba
de hacer seguimiento
e iniciar la planificación temprana en
la población a su cargo, so
pena de
ser multado en el
caso de no cumplir
cabalmente su función.
Fue
así como Amelia
conoció al que
seria el gran amor
de su vida
Joselito un Médico
de unos 28 años supremamente inteligente y
capaz, que no veía
la forma de
salir de la Isla
a Miami, como años atrás lo
había hecho su padre, Uno de los mejores cirujanos
opositor del gobierno entrante.
Ella
en el fondo lo
hacia para que aquellas personas que siempre la juzgaron sintieran orgullo y dejaran de juzgarla,
cuando descubrió que su
más grande juez
era ella misma.
Creo un lenguaje de comunicación con el corazón al cual muchos estamos
sordos o lo perdemos
a medida que crecemos o
sufrimos.
Amalia llego y se sento en la mesa:
-¿Señorita le sirvo algo?-
Levanto la cabeza al notar aquel tono de voz varonil y segura.
Después de aquella primera mirada, fue tanto su estupor, al ver esos ojos negros el aire a Chayanne, un Don Juan latino.
- ¿Un Mojito?-
Ella salió de su pequeña fantasìa.
-Un Cuba Libre.
Josè la mirada penetrante de Andrea, coquetamente y seguro de despertar las más bajas pasiones y no solo en esta atractiva mujer en la mayoría de mujeres del sexo opuesto.
Haciendo uso adecuadamente de sus encantos, aquellos músculos formados por el ejercicio..... Empezó el espectáculo en la prepaciòn del sabroso mojito.
Coloco los vasos y los froto sonando una leve melodía una a una las mujeres del Bar se fueron acercando a la Barra.
La sensualidad de sus movimientos fue cautivando a las espectadoras, quienes fijaron su mirada, primero en esos brazos fuertes, la piel morena y aquel tatuaje algo Rockero de una rosa con un ancla de Marinero.
Y cuando tus manos dibujan cada una de mis curvas,
mientras a horcajadas mi cuerpo te galopa, la pasión desbocada se esfuerza en
esas gotas de sudor que equilibran las fuerzas que no se quieren escapar.
Y tus jadeos se encuentran con mis gemidos en una balada que va in crecendo,
nuestras manos se entrelazan en el aire y juegan a hallarse en el cuerpo del
otro, perdidas en caricias que nos encienden.
Y tus labios alcanzan mis pechos y tu lengua, como fizón de
serpiente, juega con tu boca a entrelazarse en mis cumbres erectas, esas que te
llaman a quemarte, a lanzarte al fuego sin miedo... cegado en pasión y deseo.
Y mis manos, esas cuyos dedos se clavan sobre tu pecho, buscando el camino que
llega hasta tus sienes y se enredan en los cabellos que las quieren cubrir... Y
te beso los labios prietos que abandonaron mis pechos y, así, te traslado todo
mi sentimiento, toda mi eternidad... antes de que ese grito ahogado de los dos,
que no es más que un punto y seguido de un asalto previo al siguiente, que
culminará en la batalla que ambos ganaremos.
Se acerco y sin mediar palabra, le ofreció la mano para bailar. Tomo su talle seguro, dejándose llevar, conducir, domar por el ritmo . Su elegancia y su talento, fueron evidentes, de pasa seguro y certero, acorde a la música, varonil como ninguno, con la seguridad de tener control...
Amalia sintió lo que nunca antes había sentido, el volar en dos pies y con cada paso, la excitación fue tal, que en cada fibra de su cuerpo se estremeció, ante el estimulo del roce su piel se erizo.Se sintió humedad y caliente, nunca antes, experimento esto... ni con el mejor de los amantes , sentir el clímax con solo un rozar y sin estar en lecho....
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